El 1 de noviembre de 2024, un panel de apelaciones de tres jueces falló en el caso del Condado de Cape May, Estado contra Steven Italiano. La cuestión principal, según la ley NJSA 2C:40-26, se refería al cargo correspondiente por conducir con la licencia suspendida por un delito no relacionado con conducir bajo los efectos del alcohol (DWI), pero sujeto a una futura suspensión por DWI ordenada por el tribunal.
El juez Marczyk escribió para el panel en la parte pertinente: Concluimos la operación “durante el período de suspensión de la licencia” bajo NJSA El artículo 2C:40-26(b) incluye conducir después de una suspensión impuesta de la licencia de conducir por un segundo delito de DWI o subsiguientes, que no ha comenzado debido a suspensiones previas acumuladas o aún no cumplidas. El texto del estatuto no exige que el acusado esté cumpliendo una suspensión asociada con un delito de DWI específico al momento de operar su vehículo. Más bien, el estatuto tipifica como delito conducir “durante el período de suspensión de la licencia… si esta fue suspendida… por un segundo delito de DWI o subsiguientes”.
En este caso, es indiscutible que el privilegio de conducir del acusado fue suspendido por una segunda o subsiguiente infracción por conducir bajo los efectos del alcohol (DWI), junto con varias otras suspensiones, a pesar de que ya cumplía una suspensión por un delito penal previo al momento de su arresto. Dado que el acusado conducía su vehículo mientras su licencia estaba suspendida por una segunda o subsiguiente infracción por DWI, que aún no se había cumplido, se le imputó debidamente la infracción. NJSA 2C: 40-26 (b).
Además, la interpretación que hace el acusado de NJSA 2C:40-26(b) es incompatible con el objetivo de la Legislatura al promulgar la ley, diseñada para castigar a los conductores ebrios reincidentes. La interpretación del demandado frustraría el objetivo legislativo de la ley y le permitiría evitar las sanciones establecidas en ella basándose únicamente en el hecho de que tenía otras múltiples suspensiones.
Un punto que respalda el análisis del Tribunal es que los acusados no deberían ser recompensados ni exentos de sanciones por cumplir múltiples suspensiones de conducir. De no ser por estas múltiples suspensiones, estarían sujetos al lenguaje claro del estatuto penal.